lunes, 23 de enero de 2023

TOUCHDOWN AL CORAZÓN DE ESTA ESCRITORA

¡Hola! 

Hoy vengo a hablar de una de las novelas publicadas el año pasado: “Touchdown a mi corazón”. Sé que algunos de vosotr@s la habéis leído porque me lo habéis hecho saber a través de vuestras reseñas, mensajes y opiniones. Os doy mil gracias por ello. Parece mentira que ya hace siete meses desde que salió a la venta. ¡El tiempo vuela! Es una novela sencilla sin ser un drama de los que te deja roto el corazón ni te hace suspirar y me parece precioso que sea así. He leído opiniones donde se dice que es algo para pasar el rato y entretenido, y a mí eso me parece fenomenal. Siento que cuando se dicen esas cosas sobre los libros es para menospreciarlos aunque a mí que un libro me entretenga y me haga pasar una buena tarde es lo máximo. Pero volviendo a lo que es la historia en sí me pareció atractivo escribir sobre unos chicos fuertes y musculosos que se dejan llevar en parte debido a su juventud y poner a una mujer al frente para bajarles los humos a la vez que les ayude a salir a flote. ¡Mujeres al poder! El trabajo de Alice es complicado precisamente porque estos chicos no están acostumbrados a que una mujer y además una extraña les diga lo que tienen que hacer. Ellos obedecen a Wyatt, su entrenador, pero cuando el capitán del barco no puede siquiera con su vida, ¿cómo va a ayudar a otros? 

 El tema principal del libro es el duelo y seguramente muchos sabéis que hace un año perdí a mi padre. Yo soy una escritora que vuelca mucho su realidad en las novelas y quería poder reflejar lo que significa un proceso de duelo para alguien. Por eso quise reflejar un duelo del que pocos hablan y es el duelo perinatal. A decir verdad no sé si no se habla de él por ser demasiado doloroso o simplemente porque el dolor de otros nos incomoda. A raíz de mi propia pérdida el pasado mes de enero me he dado cuenta que hay mucha gente (sin hacerlo adrede por supuesto) que no te preguntan o pasan rápido por las típicas preguntas cuando un ser querido se va. Y todo eso se debe sobre todo a que son temas incómodos y no nos gusta sentirnos así cuando hablamos con alguien. Tremendo error.
En este proceso de duelo que yo misma estoy atravesando me he dado cuenta de que ni siquiera hace falta una charla intensa sobre lo que te está pasando. Con un abrazo, un gesto amable o simplemente un “¿cómo estás?” es más que suficiente. Si además se trata de la muerte de un bebé, ya sea nacido o no, las cosas empeoran porque los bebés son seres inocentes y tiernos, y si implica su pérdida, ¿cómo vamos a tratar ese tema? Por todo eso que os comento es que quise reflejar en esta historia el duelo porque el proceso es duro y muy difícil pero es muy importante llevarlo a cabo. Yo sigo trabajando mi duelo día a día incluso con una psicóloga y no me avergüenza reconocerlo. Mi padre que fue psicólogo me enseñó que las emociones siempre hay que mostrarlas y trabajarlas sin tener miedo ni sentir vergüenza. Y gracias a tratar este tema muchas me habéis comentado vuestras propias pérdidas perinatales. 

No os podéis hacer una idea lo que ha significado para mí que me lo hayáis comentado e incluso que me digáis que el libro ayuda a visibilizar un tema tan prohibido como este. Gracias a esta novela yo misma he liberado parte de mi propio dolor y todos los lectores me habéis ayudado a darme cuenta del trabajo tan importante que hacemos a veces los escritores poniendo nuestro granito de arena para visibilizar algo realmente vital. 

 Nos leemos pronto 💜

No hay comentarios:

Publicar un comentario

PROYECTO FINALIZADO

 El fin de semanada pasado puse punto final a la novela número quince. Parece mentira que ya pueda decir ese número pero ahí está.  Sueño co...